Todo el mundo conoce la verdad: la educación es un valor. La segunda verdad: cada persona es valiosa. Las discapacidades de aprendizaje limitan seriamente el proceso educativo. La tercera verdad: la información ayuda a resolver dificultades y problemas. En esta sección combinaremos tres verdades: educación, personas con discapacidades de aprendizaje e información.

Una persona nace con su código genético. Cada persona tiene sus propias ventajas en la salud y también sus propias dificultades. La aceptación y una actitud positiva son importantes.

Las discapacidades de aprendizaje se basan en la percepción y procesamiento diferentes de la información en el cerebro, estos trastornos están relacionados con la neurobiología. Pueden manifestarse como problemas con la escucha, el pensamiento, el habla, la escritura, la ortografía, las matemáticas o la hiperactividad y la hipoactividad del comportamiento.

Los trastornos del aprendizaje se dividen en dislexia, disgrafía, discalculia y síndrome de déficit de atención e hiperactividad (según la clasificación del CIE-10). Cada uno tiene sus propias características y, por supuesto, recomendaciones. A veces hay personas con discapacidades de aprendizaje mixtas que dificultan brindarles el apoyo adecuado. En tales casos, los especialistas cooperan y buscan recomendaciones adecuadas. Una persona con una discapacidad de aprendizaje tiene con mayor frecuencia habilidades cognitivas altas o promedio y talentos. La discapacidad de aprendizaje persiste a lo largo de la vida, no es pereza ni baja motivación.

Todas las discapacidades de aprendizaje tienen un procedimiento común para diagnosticar el tipo de discapacidad de aprendizaje:

1. Cooperación con el niño y la familia, tomando una anamnesis;
2. Observaciones pedagógicas y psicológicas;
3. Investigación médica (neurología, encefalograma, visión, audición, etc.);
4. Investigación de la esfera cognitiva y emocional (psicólogo);
5. Investigación de terapia del habla (fonoaudiólogo);
6. Investigación del pedagogo especializado;
7. Establecimiento de un equipo de especialistas de apoyo, cooperación regular;
8. Desarrollo de un plan individual de apoyo;
9. Cooperación continua con el niño y los padres;
10. Preparación de recomendaciones para brindar apoyo;
11. Hacer observaciones, recomendaciones en dinámicas;
12. Después de un año, hacer ajustes y correcciones en el contenido del plan individual.

Se ofrecen medidas de apoyo unificadas en el entorno escolar en casos de discapacidades de aprendizaje:

1. Más tiempo para completar la tarea;
2. Leer la instrucción de la tarea en voz alta;
3. Mayor tiempo de descanso;
4. Recordatorios visuales;
5. Tamaños de fuente más grandes;
6. Sentarse en los primeros bancos;
7. No comparar los resultados de los niños con otras personas;
8. Organizar consultas regulares (diarias) y cortas (15 minutos).

En las discapacidades de aprendizaje, es importante proporcionar retroalimentación después de cada consulta para que la persona pueda ver su progreso. Es importante que las consultas sean cortas pero regulares, para que el niño no se canse y se fortalezca el conocimiento.

En el caso de las discapacidades de aprendizaje, es importante fortalecer la personalidad:

1. Descubrir fortalezas;
2. Permitir demostrar conocimientos como cada persona puede;
3. Fortalecer la autoconfianza, la autoestima;
4. Brindar apoyo en la planificación del tiempo;
5. Reducir el estrés, promover la motivación;
6. Abstenerse de comparar logros con otras personas;
7. Expresar elogios por los logros;
8. Desarrollar la paciencia;
9. Brindar apoyo en casa, estudiar en familia.

Recomendaciones para padres y maestros si son responsables de una persona con discapacidad de aprendizaje:

1. Preparar un entorno seguro;
2. Organizar un lugar para estudiar (mesa, silla, iluminación, pizarra, bolígrafo cómodo, etc.);
3. Desarrollar un horario estructurado y predecible (negociar el horario con el niño);
4. Los maestros preparan una lección, un plan diario y semanal, informan al niño y a la familia;
5. Advertir a tiempo si se planean cambios en el horario;
6. Reducir el ruido, la intensidad de la luz, los olores, la cantidad de personas, etc.;
7. Enseñar al niño a percibir y comprender correctamente las señales no verbales;
8. Hablar sobre relaciones causa-efecto;
9. Utilizar habilidades verbales en situaciones sociales, ser seguros;
10. Enseñar lo nuevo, repetir los conocimientos antiguos;
11. Explicar metáforas, bromas, para evitar conflictos e insultos;
12. Fortalecer la autoconfianza;
13. Descubrir el campo en el que la personalidad puede mostrar altos logros (conversación con un especialista en carrera);
14. Ayudar a encontrar amigos y enseñar a mantener la amistad;
15. Ver dinámicas positivas;
16. Dejar de lado el pensamiento negativo (por ejemplo, todo es malo, nada me pasará, soy malo, etc.).

La experiencia laboral de los especialistas muestra que las discapacidades de aprendizaje afectan a la personalidad de una persona desde la infancia. Las frecuentes reprimendas y experiencias negativas disminuyen la autoestima y aumentan el estrés. Una actitud positiva, la aceptación, el diagnóstico oportuno y los métodos de aprendizaje efectivos ayudan a adquirir conocimientos, fortalecer la personalidad y fomentar el crecimiento.

La discapacidad de aprendizaje no es el fin del mundo, ¡es un nuevo desafío en el proceso de crecimiento para nuestros invitados!